"La Red de Indra, es una matriz pluralista que apoya y difunde el zenbudhismo a través de encuentros diversos y complementarios que enriquecen al caminante. Hacemos votos para que las semillas del Dharma lleguen y germinen en todos"





viernes, abril 09, 2010

Los cuatro imposibles, siempre aquí.




Mientras volamos de rama en rama, sin quedarnos en ninguna, sobre el rumor de la ciudad, cada vez más lejana, la magia sorprende nuestra razón de viejos principiantes.

Apareció de no se dónde, o mas bien no se como, nuestro querido hermano Bustamante que no se ha ido -por mas que sean sus hábitos de monje mendigo-, para recordar con humildad y simpleza (como es la verdad), que si pensamos en la historia, hacemos realidad los sueños.

En el ZEN se hacen las cuatro promesas, nos dijo. Piensen en ellas. Precisamente porque son imposibles, prometemos cumplirlas, piensen en ellas. Prometan lo imposible. Comprométanse a cumplirlo. Sin pensar.

"Mis errores son incontables, prometo corregirlos todos".
"El conocimiento es infinito, prometo saberlo todo".
"La vida de Buddha es incomparable, prometo hacer la mía igual a la suya".
"Los seres vivientes son innumerables, hago la promesa de salvarlos a todos".

Nuestra céntrica sangha de Huérfanos, dónde dejamos de serlo, porque Prajña y Karuna nos acogen como padre y madre, pareció iluminarse con la metáfora que orientó la paradoja. Suavemente habló el monje, haciendo que las palabras que para nada sirven, siguieran repicando en las letras.

"El bosque se estaba quemando. Todos los animales escapaban despavoridos. Un pequeño gorrión, sin embargo, volaba en sentido contrario. Llevaba una gotita de agua en su pico y la echaba sobre el incendio, volvía al arroyo y de nuevo, con otra gotita, a tirarla sobre el fuego. Una rana, con alguna ironía, le preguntó si creía que con eso iba a apagar el incendio. "Tal vez si, tal vez no -respondió el pajarito-, estoy haciendo mi parte".

1 comentario: